Ejemplos de votos matrimoniales
Una de las preguntas más comunes cuando pensamos en una ceremonia civil son los votos matrimoniales. Buscamos ejemplos de votos en internet para inspirarnos, pero, aún con todo, continúan las preguntas: ¿Debemos hacerlos? ¿Cuánto tienen que durar? Y, si yo quiero hacer votos y él no, ¿pasa algo? Así que hemos pensado escribir un post sobre votos de amor para intentar aclararos todas vuestras dudas y daros algunas tips para vuestros votos de boda.
¿Votos sí o votos no? En nuestra opinión, votos sí, siempre. Es un momento precioso, quizá el más romántico de vuestra vida y estáis rodeados de todas las personas que más os quieren. Así que, ¡se debe aprovechar! De todas formas, entendemos que hay muchas personas que a las que les puede dar vergüenza, temen emocionarse o, simplemente, “no se ven”. Eso no significa que sea mejor o peor, pero si os atrevéis, os aconsejamos hacerlo. ¡Dan un toque muy especial y emotivo a la ceremonia, seguro!
Formato: Los clásicos son una lista de frases que empiezan por un “Te prometo” o “Quiero”, lo ideal es mezclar frases más románticas y generales con deseos y promesas más cotidianas e íntimas. Aquí algunos ejemplos de votos matrimoniales en este sentido:
Prometo cuidar de ti de lunes a domingo.
Prometo decirte “te quiero” todos los días de mi vida.
Prometo aguantarme las ganas de abrumarte con los spoilers de tus series favoritas.
Prometo dejarme hacer cosquillas en tus días grises.
Pero si te animas con un texto largo, es tu momento, así que… ¡adelante! Puedes escribir qué es lo que más te gusta de él/ella, contar porqué estáis allí, qué son las cosas que hacen únicas a esa persona y vuestra relación… Es el momento de no ser tímido y decir aquello que normalmente damos por supuesto que la otra persona ya sabe por el simple hecho de estar con ella y haber dado un sí quiero. Nosotros siempre pensamos que nada se debe presuponer y, cuanto más digamos las cosas bonitas, mucho mejor, para todos, siempre.
Duración: lo ideal en el primer formato no son más de 12-15 frases; en el segundo, no más de tres cuartos de página. Pensad que una ceremonia larga, por muy intensa y bonita que sea, siempre deja de ser atractiva. Cada vez tenemos menos poder de concentración, así que, si no queréis perder a la audiencia, haced caso al dicho: lo bueno, si breve, dos veces bueno.
¿Cuándo? Lo tradicional es durante la ceremonia, antes del “sí quiero” pero, si uno es más tímido que el otro o creéis que os vais a emocionar y no os van a salir las palabras, os proponemos dos variantes:
– Leer los votos en la ceremonia oficial (si os dejan): al ser una ceremonia más íntima, igual os sentís más cómodos y no hace falta que leáis los dos. En este caso, os recomendaríamos que la lectura sea mucho más breve.
– Leer los votos antes o durante el banquete: esta opción es bastante común entre las ceremonias religiosas y funciona muy bien cuando uno de los dos no se atreve a leer. En ese caso, lo ideal es hacer una introducción en la que agradeceremos a los invitados su asistencia para luego, focalizar el discurso al novio/novia.
¡Tip de experta! Hagáis o no votos, sea una frase o un discurso completo, dure 1 minuto o 10, cualquier opción es correcta ya que, como siempre decimos, es vuestro día y todo lo que hagáis será ideal. ¡Así que, si queréis hacer votos, porque creéis que es un momento precioso para decir lo que sentís, pero no os salen, contad con nosotros y, si no queréis hacer votos porque os da vergüenza o teméis poneros a llorar, no os preocupéis, vuestra boda seguirá siendo perfecta!