¿Por qué contratar un discurso de boda?
Desde que empecé este proyecto (en serio) en el año 2014, me he pasado el tiempo justificando el servicio a familiares y amigos. Lo cierto es que puede parecer extraño, pero sólo porque todos tenemos la capacidad de escribir. En cambio, no todos sabemos tirar unas buenas fotos, cocinar un pastel delicioso o hacer un retrato realista increíble.
La diferencia reside en que una cosa es saber escribir “hoy es martes”, y otra bien distinta expresar sentimientos a través de las palabras, crear un discurso organizado, conseguir mantener el ritmo y la atención, huir de la prosa pastelosa y, finalmente, conseguir emocionar a la audiencia.
Cuando me preguntan, siempre pongo el mismo ejemplo. Si quisiéramos dibujar a un perro, podríamos coger papel y lápiz y, quién más, quién menos, dibujaría un hocico, unas patitas y una cola. Ahora bien, en el momento que queremos hacer un retrato realista de nuestro perro, si queremos un resultado que se parezca a la realidad, tendremos, sin duda, que contactar con un profesional.
Con los textos ocurre un poco lo mismo, todos podemos hacer un discurso para una boda o apañarnos con el guión de la ceremonia civil, pero si queremos que el resultado sea especial y capaz de emocionar, deberemos acudir a un profesional para que nos ayude, nos oriente o nos escriba el discurso.